Portada del artículo sobre lo que hay que saber antes de crear una página web

Pasos obligatorios antes de crear una web: elementos clave y checklist

Tienes un negocio, vas en serio y quieres crear una web o un blog que te ayude a captar tus futuros clientes, pero no sabes por dónde empezar. Por otro lado, te gustaría actuar ya porque el tiempo es oro y estás a punto de abrirte un blog cualquiera. ¡Para! En el artículo de hoy vengo con una serie de preguntas que deberías hacerte antes de crear una página web que convierta. Además, al final del artículo podrás descargar una checklist gratuita que te ayudará si decides montar una web desde cero por tu cuenta , pero también si delegas esta tarea a un diseñador web. ¿Empezamos?

Índice de contenidos

¿Por qué quieres crear una web o un blog?

Cada caso es un mundo y las razones que nos hacen querer tener un sitio web o un blog son muy diferentes. Eso está claro. Sin embargo, creo que sería muy interesante arrojar un poco de luz sobre la diferencia (cada vez más sutil) entre un sitio web y un blog. En efecto, por un lado, casi cada página web tiene un blog, ya que es una excelente estrategia de posicionamiento orgánico. Por otro, hay muchos blogs que en realidad desempeñan ciertas funciones de páginas. Por ello, verás que en muchos casos el término web es intercambiable con el término blog, aunque no siempre.

Aclarado este tema, pasemos a los 4 motivos por los que la gente decide crear una web.

Crear una web corporativa para tu negocio

Este caso abarca los negocios que ya llevan tiempo operando en el mercado, pero que hasta ahora carecían de presencia en Internet. Por lo tanto, necesitan crear una web para poder, por ejemplo:

  • incluirla en las tarjetas de visita o en los banners que utilizan en varios eventos,
  • añadir la dirección en su ficha de Google My Business,
  • dar más credibilidad a su marca e invertir en campañas de pago.

Por cierto, este último método resulta ser mucho más eficiente que algunas estrategias de marketing offline como el reparto de folletos por la calle, técnica también conocida como publicidad intrusiva offline.


Ejemplo: Desideratum Tattoo, es decir, página web de un estudio de tatuajes en Barcelona. Ejemplo de un negocio con un local físico que también tiene presencia en Internet y en las redes sociales. Esto a nivel regional o nacional. A nivel internacional también tenemos webs corporativas de marcas gigantescas tipo Nestlé.

Por cierto… ¿Tienes un estudio de tatuajes? El artículo sobre tipos de contenido para un blog sobre tatuajes te va a encantar. ¿Tienes otro tipo de negocio? Sigue leyendo.


Crear una web y tener un negocio online

Cada vez más gente decide montar un negocio orientado en su totalidad hacia el mundo online. Se puede tratar de un e-commerce o simplemente de empresas que quieran prestar sus servicios a través de Internet. El tamaño de la empresa es secundario, su objetivo principal consiste en vender productos o servicios a través de Internet y utilizando las estrategias de Marketing Digital. ¿Por qué? Normalmente porque es allí donde están (o estarán) sus clientes potenciales.

Si estás pensando en basar tu negocio en una página web (sobre todo si le añades una tienda online), es recomendable consultar tus ideas con un experto en diseño web (o directamente contratarlo) con conocimientos de SEO. ¿Por qué? Porque los proyectos muy complejos necesitan una arquitectura web adecuada desde el principio. De lo contrario, después te traerán dolores de cabeza muy molestos.


Ejemplo: Mr.Wonderful podría ser un ejemplo de un e-commerce disponible en diferentes países e idiomas.


Página web para trabajar tu marca personal

En esta categoría encontramos sobre todo a personas que en vez de crear una marca, deciden convertir su nombre y apellido en una. Hay varios motivos para desarrollar la marca personal. Puede servir a personas que:

  • buscan trabajo y quieren diferenciarse de los demás candidatos.
  • crean su propio portfolio para tener un argumento más a la hora de negociar el sueldo.
  • trabajan como freelancers y su página web (junto con el blog) les ayuda a captar clientes.
  • aprovechan el éxito de su marca personal para vender productos o servicios e ir ampliando su negocio.

Ejemplo: la página en la que estás ahora mismo (es decir la mía) es un ejemplo de cómo trabajar la marca personal en Internet. De momento sin vender nada.


Crear un blog y ganar dinero con él

También hay casos de personas que empezaron a escribir sus blogs sin fines comerciales y luego decidieron

  • monetizarlo a través de publicidad,
  • montar un negocio basado en el éxito del blog,
  • centrarse en otros formatos (como YouTube o Instagram) dejando el blog como el segundo pilar de su negocio.

Como ves, las posibilidades son infinitas y es verdad que al crear una página web o un blog nunca sabes adónde te llevará esta aventura. Aun así, reflexionar sobre las bases primero, multlplicará las posibilidades de tener éxito. Y segundo, hará que todo el proceso de transformación posterior sea más llevadero.


Ejemplo: Esturirafi que por un lado es un blog, pero por otro contiene anuncios de afiliados y una tienda con productos zero waste.


¿A quién quieres atraer a tu web o blog?

Aunque de momento no vendas nada, tienes que saber a quién te diriges, quién es el lector ideal de tu blog, qué tipo de personas disfrutarán del contenido que publiques. Aunque parezca un detalle insignificante, te aseguro que es lo que necesitas saber antes de crear una web. Para que, desde el primer momento, tus textos sean coherentes y hagan que el lector quiera saber más.

¿Quién quieres que te lea?

Encontrar tu cliente ideal, tu buyer persona, te facilitará muchas cosas a la hora de escribir tus posts. Sabrás

  • qué estilo y qué tono escoger (¿más bien desenfadado o formal?),
  • cuáles son sus mayores preocupaciones (y cómo puedes resolverlas a través de tus posts)
  • qué tipo de información está buscando (para poder brindársela).

Consejazo: si el carácter de tu negocio te lo permite, escribe tus posts como si estuvieras conversando con tu lector. De este modo, sonarás más natural y convincente.


¿Por qué tu oferta es diferente?

Necesitarás esta información para hacer que el usuario se quede en tu web en vez de salir corrriendo tras el primer click. Verás, el problema con Internet tal y como está ahora es que es cada vez más complicado destacar en el mar de contenido que nos ataca por todas partes.

Para destacar tienes que ser (o por lo menos parecer) diferente. Saber cuáles son tus puntos fuertes y si éstos corresponden a las expectativas del usuario. Todo esto para poder ofrecer algo que los demás no puedan (y no me refiero a precios cada vez más bajos).

Una vez filtrada y rescatada esta información, sabrás qué y cómo escribir en tu página web, en el blog y, más adelante, en las campañas de promoción.

¿Qué mas necesitas saber antes de crear una web exitosa?

Vale. Ya tienes tu buyer persona definido, pero todavía te quedan otras cuestiones por tratar. Entre ellas, el nombre de tu futura web, la extensión del dominio, el hosting o el diseño. ¡A por ello!

¿Cómo se va a llamar tu página web?

Esta es quizás la parte más delicada de todo el proceso. No solamente a nivel técnico (aunque teniendo en cuenta el dominio, sí), sino que también a nivel de la marca. Crear una web o un blog bajo un nombre y cambiarlo en 5 o 7 meses, es como empezar desde cero. Sin hablar de la necesidad de comprar otro dominio. Molestias logísticas y financieras.

Si quieres elegir bien el nombre de tu página web o blog (que estará reflejado en el dominio), siempre ten presentes los siguientes factores:

  • longitud
  • nivel de facilidad para el usuario
  • disponibilidad de los dominios
  • disponibilidad en las redes sociales
  • objetivo

¿Cómo de largo debería ser el dominio de una web?

El nombre de una página no debería ser demasiado largo. De lo contrario, los usuarios lo tendrán crudo para recordarlo. Y si no se acuerdan del nombre, es más que probable que no visiten tu web. A veces un dominio largo pero fácil de recordar funciona mejor que uno corto, pero complicado. A veces no. En este aspecto el sentido común (y una encuesta entre tus amigos con más criterio) es tu mejor aliado, ya que no existen respuestas buenas y malas. Aunque, como te comento más arriba, los dominios cortos suelen funcionar muy bien.

¿Cómo elegir un nombre ideal para una web?

Si ya tienes un negocio físico, lo tienes fácil. Tu dominio se llamará igual que tu marca. Si no, es hora de pensar en el dominio más adecuado en tu caso. Acabo de mencionar el tema de la longitud, pero no lo es todo. El dominio ideal no debería ser demasiado largo, ni tampoco demasiado complejo, lleno de guiones, números u otros caracteres raros.

Ahora bien, claro que encontrarás muchos ejemplos de páginas web que han triunfado a pesar de contener estos elementos (como por ejemplo: Blogger3cero) lo que confirma que nada es imposible. Como regla general, sin embargo, los factores mencionados arriba suelen jugar en tu contra.

¿Y qué pasa con nombres en otros idiomas? Todo depende de si tu público objetivo (tu buyer persona) lo recordará sin problema o no. Además, un nombre de dominio no tiene por qué ser un sustantivo. Puede ser una frase, una especie de call to action, una keyword de cola larga.

En definitiva, el nombre ideal es aquel del que el cliente se acuerda al día siguiente. Ya sea porque sea un juego de palabras ingenioso o simplemente porque suene bien.

¿Qué extensión de dominio elijo para crear una web?

No es lo mismo crear una web con una extensión de dominio .com, .es, .net que .unicornio (esta última me la acabo de inventar, pero quién sabe lo que nos depara el futuro). Lo ideal es poder tener la extensión .com (a no ser que quieras obtener mejores resultados a nivel nacional o regional, allí .es o .cat funcionará mejor) o, en su falta, .net.

El problema con las demás extensiones de dominio es que al ser menos populares pueden ocasionar dos problemas. Primero, otra vez, puede que los usuarios no se acuerden. Segundo, puede que acostumbrados al .com no confíen en extensiones (para ellos) desconocidas.

Por ello, nunca está de más echar un vistazo a la disponibilidad del nombre con las extensiones de dominio que te interesen.


¡Ojo! Recuerda comprar dominios con diferentes extensiones por razones de seguridad. ¿Qué significa esto en práctica? Que si tu sitio web se llama: www.misitioweb.com, te interesa comprar también www.misitioweb.net y www.misitioweb.es. Más que nada para que a tu competencia no se le ocurra hacerte mala prensa a través de una web con contenido pésimo, altamente confundible con la tuya.


¿El nombre de tu futura web está disponible en las redes?

Y si no es el caso, si le puedes añadir variantes que valgan la pena, mucho mejor. Como comprenderás, tener un nombre diferente en la web, en Facebook, en Twitter y en Instagram no es lo ideal. Por ello, en cuanto veas que están libres, resérvalos creando un perfil, aunque de momento tenga que estar vacío.

¿Con qué objetivo quiero crear una web o un blog?

Lo que hemos hablado antes. Si lo que te interesa es el branding, en tu dominio tiene que aparecer el nombre de tu marca. Si tu objetivo es desarrollar tu marca personal, normalmente incluirás en el dominio tu nombre y apellidos o su variante.

Por otro lado, si intentas posicionar una web de nicho o dentro de un sector en concreto, lo suyo sería utilizar las palabras clave adecuadas. Aunque ten en cuenta que esta solución (aparte de las ventajas) tiene sus limitaciones. Por ejemplo si llamas tu web, digamos, El blog de SEO, pero con el tiempo, quieres escribir sobre Redes Sociales, puede haber un problema de coherencia.

Como ves, no existe una respuesta concreta, ya que cada caso es diferente. Y la decisión adecuada es aquella que mejor se adapte a tus objetivos. Por ello, es importante analizar antes de darle al botón de «crear una web».

¿Dónde alojar la página? ¿Cómo elegir un buen hosting?

La elección de un buen hosting es crucial tanto para ti como para la salud óptima de tu página web o de tu blog (y por consiguiente, su posición en los buscadores).

Un buen hosting es vital para que puedas guardar calma en caso de cualquier fallo técnico o emergencia. Para ello necesitarás entre otras cosas:


  • un buen servicio técnico con responda con rápidez y te proporcione soluciones,
  • un sistema de solucionar problemas eficiente (como por ejemplo los tickets),
  • acceso a algún tipo de panel de control para gestionar y monitorizar lo que pasa con tu web,
  • disponer de una copia de seguridad del blog,
  • espacio en disco (del hosting que contrates) adecuado para el tipo de página que tienes (no es lo mismo un blog que una página de noticias con 50 publicaciones diarias),
  • posibilidad de registrar varios dominios.

Es más, gracias a un hosting de calidad:


  • minimizas el riesgo de que tu página sea hackeada,
  • no te arriesgas a que tu web se caiga tras el primer aluvión de visitas,
  • está alojado en un servidor en tu país (o donde más audiencia tengas) lo que ante los ojos omnipresentes de Google siempre es una ventaja,
  • te ofrece una buena velocidad de carga (lo que no quiere decir que no tengas que optimizar los demás aspectos de tu página),
  • y un certificado SSL para mostrar que tu página es de fiar tanto para el usuario como para Google.

Estos han sido unos pocos ejemplos de aspectos que hay tener en cuenta a la hora de elegir el hosting para tu página. No soy experta en hosting pero sé quién pilota de este tema muy bien. Como ya de costumbre al final del artículo te dejo los enlaces a los artículos que te ayudarán a elegir el mejor hosting para tu proyecto. Aunque en general ya te puedo decir que en este momento, las empresas que vale la pena tomar en cuenta son: RaiolaNetworks, Webempresa y SiteGround.

Todo esto porque me gustaría que te quedases con esto: el hosting es una parte esencial de tu proyecto. Y detrás de cualquier blog o página de éxito tiene que haber un hosting de calidad. Crear una web sin un hosting de fiar es como querer construir una casa sobre arenas movedizas.

Elegir los colores corporativos para tu página web

Habrás escuchado mil veces sobre la psicología de los colores y las emociones que generan. Y aunque parezca imposible, al escoger los colores inadecuados espantarás a los visitantes de tu web, antes de que les dé tiempo a familiarizarse con su contenido.

Además de conectar con tu audiencia, los colores de tu página o tu blog deberían

  • transmitir los valores de tu marca,
  • estar en armonía con las características de tu sector,
  • cumplir las expectativas de tu cliente ideal.

¿Por qué es importante elegir bien? Porque tus colores corporativos representarán tu marca no sólo en tu blog o web, sino también en tu logo, en tus redes sociales y en cualquier publicación (como folleto promocional o tarjetas de visita) que tenga que ver con tu negocio.

Si aciertas, mucha gente con sólo echar un vistazo a tu publicación en Twitter, sabrá que este cotenido en concreto es tuyo. Sin hablar de usuarios que le harán click sólo porque les gustará la portada y sus colores. Cuesta admitirlo, pero a veces todos somos así de simples.

En cambio, si fallas, estarás invisible o perderás lectores, usuarios o clientes potenciales.

Pero que no cunda el pánico. No tienes que ser diseñador(a) para elegir bien los colores. Lo que sí que tienes que hacer es definirlos antes de crear tu web o tu blog. Dicho esto, en Internet ya existen muchos artículos de calidad sobre cómo combinar colores corporativos y qué impacto tiene cada uno de ellos. Ya sabes dónde he puesto los enlaces. De momento no te distraigas.

Tu logo tiene que lucir dentro y fuera de tu página. Sobre todo en las redes sociales, pero también en los infoproductos que promocionas, los vídeos que grabas o las tarjetas de visita que repartes durante ciertos eventos.

Y no siempre tiene por qué estar lleno de elementos complicados. A menudo el minimalismo funciona mejor que el diseño barroco. A veces no. Aunque si te fijas, la mayoría de las grandes marcas, apuestan por el estilo minimalista.

De todas formas, un buen logo:

  • es fácil de reconocer
  • agradable a la vista
  • está en armonía con la filosofía de la marca

También hay que matizar un detalle. En realidad existen logotipos, isotipos, imagotipos e isologos. Y sí, te tengo preparado un enlace hacia un artículo que lo explica. Mientras tanto sigamos con los puntos del día que nos quedan.

Próxima parada: una tipografía fácil de leer

La necesitas por dos razones. Primero, un usuario que aterrice en tu web, tiene que sentirse a gusto y poder leer los textos con facilidad. Segundo, la tipografía define tu marca también en las portadas de tus posts, tus campañas de Facebook e Instagram Ads y otros diseños promocionales.

¿Cómo escoger la mejor tipografía para una web?

¿Qué factores hay que tener en cuenta? En pocas palabras escoge una fuente que:

  • sea legible (sobre todo si incluyes tipografías que imitan la escritura manual),
  • sea original (ya es hora de decirle adiós a Times New Roman),
  • refleje tu estilo y el mensaje que transmite tu blog y tu marca personal (un blog sobre derecho con tipografía ornamental no es lo ideal),
  • puedas usar libremente incluso para proyectos profesionales (de lo contrario, puedes tener problemas con derechos de autor).

¿Dónde encontrar tipografías gratuitas para uso personal y comercial?

Dafont: una plataforma disponible en español con numerosas fuentes gratuitas. Lo bueno es que las fuentes se pueden buscar por categorías. Pero ¡ojo!: antes de descargar una fuente, asegúrate cuáles son los usos permitidos. Algunas son gratis 100%, otras en cambio tienen algunas limitaciones.

Google Fonts: sí, Google también ofrece una colección bastante potente de fuentes gratuitas. Lo que más me gusta de esta plataforma es que cada fuente venga con una muestra de texto, ya que de este modo es más fácil comprobar si la fuente que te interesa refleja al 100% el estilo de tu página.

1001 Free Fonts: igual que Dafont ofrece tanto fuentes totalmente gratuitas como versiones o de prueba o con usos limitados.

¿Quieres que la gente te lea? ¡Planifica el contenido!

Siempre, siempre insisto en que antes de crear una web o un blog, tienes que saber qué publicarás allí. O por lo menos tener una idea. Desde el punto de vista del posicionamiento SEO: tanto las páginas estáticas como las dinámicas necesitan una palabra clave principal y enlaces internos para posicionar mejor y más rápido.

Desde el punto de vista del usuario: una página bien estructurada, con artículos de interés relacionados entre ellos naturalmente invita a pasar más tiempo en ella. Y cuanto más tiempo se quede el usuario, mayor es la probabilidad de conversión. Y aunque no la haya, Google Analytics verá que el tiempo de permanencia es alto lo que siempre jugará a tu favor.

Escoge las mejores palabras clave para cada artículo

Antes de escribir nada, decide las palabras clave por las que te quieres posicionar.

Primero, si quieres crear contenido de valor, tienes que saber qué es lo que buscan tus clientes potenciales o los futuros lectores de tu blog. Y ayudarles con tus artículos lo mejor que puedas. Escribir para ti es bonito, pero no te traerá ningún beneficio a nivel profesional. Te lo digo por experiencia: mi primer blog sobre idiomas fracasó estrepitosamente porque escribía sobre temas que me interesaban a mí. Pero a nadie más.

Segundo, para que tu blog empiece a ser visible para Google, tienes que ser constante y publicar de manera regular contenido optimizado. De lo contrario, Google pasará de ti y dependerás solamente de las redes sociales para dar visibilidad a lo que haces. Y los algortimos de las redes suelen ser aún más caprichosos que el de Google.

Una cosa más. Todo el esfuerzo que dediques a encontrar las palabras clave idóneas para tu negocio será en vano si no analizas la intención de búsqueda que hay detrás.


Por ejemplo: si te dedicas a diseñar páginas web, piénsatelo dos veces antes de apostar por búsquedas tipo: cómo crear página web con WordPress. ¿Por qué? Porque la persona que introduce esta pregunta en el buscador no busca a alguien quien le diseñe la web. Es más probable que quiera aprender a hacerlo por su cuenta. Ahora, si vendieras un curso de diseño de páginas web con WordPress para principiantes, otro gallo cantaría.


Prepara tu calendario editorial

Si hablamos de las keywords, deberíamos hablar también de las tendencias, otro elemento que te ayudará a adaptar el contenido de tu blog a las necesidades de los lectores. Una buena herramienta de analizar las tendencias es BuzzSummo.

Sabiendo qué palabras clave o qué tendencias quieres incluir en tu estrategia, puedes planificarlas en el tiempo. De este modo, sabrás cuándo te toca redactar otro artículo, cuál será la temática, qué tipo de contenido prepararás, cómo enlazarlo internamente y cómo lo promocionarás.

En otras palabras tendrás el control sobre el contenido que aparece en tu página o blog. Hablando de control, otro recurso que deberías tener en cuenta a la hora de redactar el contenido es el calendario del Community Manager.

Así, sabrás cuándo cae San Valentín, la Navidad u otras ocasiones en las que, por lo general, tu público estará buscando información relacionada con estas fechas. Y lo que quizás es más importante aún: detectarás las fechas clave para la temática de tu blog.

Hay muchos calendarios de Community Manager disponibles en la web, más adelante comparto contigo mis opciones preferidas.

¿Con qué frecuencia vas a publicar?

Este detalle es importante a la hora de hacer promesas. Si prometes a tus lectores que publicarás una vez por semana, tendrás que cumplir tu palabra. Algunos podrán sentirse ofendidos e irse. Otros no, pero es difícil de prever las proporciones de cada grupo.

Muchos te dirán que cuanto más publiques, mejor. Yo no soy tan radical.

Lo ideal, efectivamente, sería publicar a menudo proporcionando contenido de valor. Sin embargo, escribir un artículo que destaque toma mucho tiempo. Si no eres blogger a tiempo completo, cumplir estos objetivos puede llegar a ser complicado. Y eso, sin contar los imprevistos. Por eso, es importante saber cuánto tiempo tardas en crear tus contenidos.

Sí, crear contenidos, porque además de escribir, tendrás que tener en cuenta las horas que dedicas a la

  • búsqueda de información,
  • optimización,
  • corrección,
  • selección de imágenes.

Por ello, por un lado soy partidaria de implementar un calendario editorial en el proceso de creación de tu blog y por otro, de no prometer nada de antemano. Sobre todo en las redes sociales.

Crear un blog y echarse a dormir? Naranjas de China

Es hora de diseñar portadas e imágenes

Hoy en día, los posts entran por los ojos. Ya sea gracias al título o a la imagen de portada. Antes bastaba con elegir una imagen más o menos bonita de los bancos de imágenes. Sin embargo, con la cantidad de blogs que ya operan en la Red, esta táctica ya no da resultados.

Tus lectores potenciales tienen cada vez más prisa y menos paciencia. Quieren saber qué beneficios les aporta tu artículo en cuestión de segundos. Si no, a otra cosa mariposa. Por ello, te recomiendo hacerte amig@ de algún programa de diseño y personalizar las portadas.

Por personalización entiendo añadirles un título atractivo (pero no engañoso) que mejor resuma el contenido de tu blog, la dirección, el nombre del blog o bien tu nombre de usuario en redes sociales. Aparte de una imagen que sea un imán para la vista.


Consejazo: si no quieres usar programas como AdobeIllustrator o Sketch, ya sea por falta de práctica o dinero, puedes recurrir a herramientas gratuitas como, por ejemplo, Canva o Crello. Para empezar será más que suficiente.


Si escribes textos largos es recomendable enriquecerlos con unas cuantas imágenes para amenizar la lectura visualmente. Aquí tienes dos opciones: aprovechar los recursos disponibles en los bancos de imágenes o preparar tus propios diseños.

¿Ventajas? Los bancos de imágenes (como Pixabay o Unsplash) te hacen ahorrar mucho tiempo. ¿Desventajas? corres el riesgo de encontrarte con las mismas fotos en algún otro rincón de Internet. Dale una vuelta y obtendrás las ventajas y desventajas de diseñar tus propias imágenes.

Artículos con elementos extra molan más

Para destacar hay que innovar. En efecto, un artículo con elementos adicionales como podcast, un vídeo explicativo o una infografía (aunque estas últimas ya no generan tanto impacto como antes) siempre rendirá mejor.

No hace falta que los incorpores enseguida. Más vale reflexionar sobre el formato, que hacer las cosas rápido y mal. Sin embargo, tenlo en cuenta a la hora de elaborar una estrategia para tu blog.

Creación de una web y requisitos legales

Hace años crear una web no conllevaba tantas obligaciones legales como ahora. Sin embargo los tiempos, como todo, cambian. Hoy en día incluso las páginas sin fines comerciales tienen que cumplir con unos cuantos requisitos. Ahora te digo cuáles son.

Leyes para páginas web

La parte más tediosa de blogging que, desgraciadamente, no se puede omitir. Los cambios que se introdujeron en el año 2018  afectan a todo el mundo. Por muy pequeña que sea tu página web o blog, la nueva ley RGPD te obliga a proporcionar al usuario una serie de informaciones relacionadas con tu web.

En cuentas resumidas, a día de hoy, tu sitio web tiene que contener los elementos siguientes:

  • Política de privacidad
  • Política de cookies
  • Aviso legal (si eres empresa)
  • Información sobre archivos cookies
  • Consentimiento del usuario para campos como formulario de contacto, comentarios y formulario de inscripción a la newsletter.

La Política de Privacidad y de Cookies igual que el Aviso Legal son páginas estáticas que puedes generar como cualquier otra página.

En cambio, los formularios de consentimiento que tienen que aparecer en la página de contacto, junto a la newsletter y a los comentarios se tienen que modificar en las secciones correspondientes a cada elemento o a través de plugins. Aunque todo dependerá del CMS (content management system o gestor de contenidos) que escojas para tu blog.

No soy experta en leyes, en cambio, se me da bastante bien encontrar información de valor. Como de costumbre pues, abajo del todo he añadido un enlace hacia un artículo que explica muy bien el tema de la nueva RGPD .

¿Crear una web sin pensar las redes sociales? Un gran error

Aunque no parezca necesario, es más que recomendable pensar con antelación en las redes sociales. Y cuando digo con antelación, me refiero al periodo justo antes de crear una web o un blog.

Primero, es importante decidir qué redes sociales funcionarán en tu caso. Segundo, reservar los nombres de los perfiles tanto en las redes en las que vas a estar como en las que no. Creando cuentas con antelación evitas que:

  • se te adelante tu competencia llevándose tus seguidores,
  • alguien suplante tu identidad y te cree problemas,
  • tus cuentas estén completamente vacías o con publicaciones escogidas al azar el día de lanzar las fanpage.

Las dos primeras cuestiones parecen obvias. La que sigue quizás ya no tanto. Vamos a explicarla. Las redes sociales, igual que muchas otras cosas, funcionan con una estrategia detrás.

Y la estrategia no solo engloba aspectos técnicos, sino que también psicológicos. Un perfil medio vacío no inspira confianza, disminuye la posibilidad de alguien la quiera seguir o dejar un comentario. Teniendo en cuenta estos aspectos siempre es mejor ir preparando tus redes sociales al mismo tiempo que tu página web.

Y aunque a menudo es un trabajo titánico, vale la pena hacerlo en cuanto antes para después, una vez lanzada la página, centrarse en maneras de promocionarla de forma eficaz.

Enlaces de valor, por favor

Ahora que ya sabes qué hacer antes de crear una página web a grandes rasgos, es hora de profundizar el tema. Gracias a los enlaces que te iba prometiendo a lo largo de este post. Y por supuesto la checklist que te será de gran ayuda visual.


Quiero descargar la checklist con pasos antes de crear una web.


Elegir un buen hosting

Aquí te dejo un artículo escrito por Rubén Alonso en el que te explica con pelos y señales cuál es el mejor hosting en español. Y si piensas crear tu página web con WordPress, escucha el podcast de Rafa Arjonilla sobre el mejor hosting para WordPress. Te lo recomiendo encarecidamente y sé de lo que hablo: Rafa es uno de los mejores profesores de WordPress de los que he tenido el placer de aprender.

El diseño de tu web

Primero, echa un vistazo a este artículo de Bego Romero sobre la psicología del color. Después, aprende a combinar los colores en una web. Al final descubre diferentes tipos de logos.

El calendario del Community Manager

En el blog de Jessica Quero encontrarás este calendario del Community Manager para 2019. Si, por lo que sea, éste no te convence, Manu Duque también tiene uno.

La búsqueda de palabras clave

Aquí te traigo dos artículos: uno del Ciudadano 2.0. Y otro de Borja Aranda Vaquero.

La ley de protección de datos para páginas web y blogs

Tal y como he mencionado antes, no soy experta en leyes. En cambio, Marina Brocca sí que lo es. Por eso, te recomiendo su artículo sobre la Ley RGPD.

¿Más preguntas antes de crear tu web?

Tienes que saber una cosa. He escrito este artículo para mi mejor amiga que está a punto de montar su propio negocio. Las preguntas que me hizo me han servido de inspiración para redactar esta mini guía. Pero a lo mejor a ti te han surgido otro tipo de dilemas. Si es el caso, no dudes en dejarme un comentario abajo. Intentaré ayudarte lo mejor que pueda.

O quizás… no tienes una página web, pero también tienes un(a) amig@ con un montón de preguntas sobre el tema. ¿Es el caso? ¡Comparte este artículo!

 

 

Edyta Pukocz
edytasanchez@gmail.com

Hablo idiomas, escribo textos y optimizo páginas web. El SEO me fascina y eso que el Marketing de Contenidos también me tiene cautivada. ¡Ah! Y estoy felizmente enamorada de la Ciudad Condal. ¿Nos seguimos en las redes?

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